Misión Unir capacidades globales para una gestión racional del Agua
Filosofía
El Hombre, Guardián del Agua
El Hombre es el guardián de los recursos hídricos, no el dueño de estos. En este sentido su papel debe ser administrarlos equitativamente, no sólo entre los seres humanos y entre los diferentes usuarios sino además reconociendo al medio natural como lugar de residencia y mecanismo reciclador del agua y como tal, con derecho a usar y conservar una proporción significativa de esta.
La Racionalidad en la Gestión del Agua
El agua transversaliza todas las actividades humanas, es una materia prima, una fuente de energía y está contenida en todo lo que el hombre hace y produce. De igual forma, la gestión del agua debe considerar que esta no es un sector aislado, que es indicador directo de las condiciones de sanidad social y económica y que debe incorporar la visión de todos los sistemas que se superponen e interactúan con el recurso hídrico y que generalmente son el origen de los problemas hídricos. Esto significa una aproximación holística y una gestión basada en los principios de la Teoría General de Sistemas.
Apertura de la Información
La Información en el campo del agua está altamente condicionada por los principios políticos o financieros que sustentan la producción de dicha información. Hay que abogar por una información en materia de agua, independiente, abierta y libre de intereses personalistas que, de manera general, sea entendible por el mayor número de personas, con el fin de que éstas sean capaces de interpretar los problemas hídricos que las afectan.
El Hombre, Responsable de la Vida
La vida es un fenómeno discontinuo en el Universo pero abundante en el planeta Tierra. La naturaleza de las especies y sus interrelaciones hacen que exista competencia entre estas, competencia que en ausencia de cambios grandes en el entorno, alcanza estados de sostenibilidad y equilibrio en el tiempo. La especie humana ha desarrollado la capacidad de alterar ese equilibrio, tanto en desmedro suyo como del entorno y del resto de las especies, es por tanto responsable del cuidado de los recursos naturales, del medio ambiente y de la pervivencia de las demás especies.
El Agua, Derecho Humano
El agua es un recurso único y es irremplazable como sustento de la vida. Para el ser humano el agua tiene además valor espiritual, social y simbólico. Por todo esto, el agua de consumo humano trasciende la naturaleza de bien económico y es, en todo el alcance del concepto, un derecho humano. El reconocimiento del derecho humano al agua implica obligaciones por parte de los gobiernos y de los organismos internacionales. Estas obligaciones deben trascender el mero discurso y traducirse en acciones concretas que impliquen la movilización de recursos financieros, la modificación de los marcos jurídicos que regulan al recurso hídrico como una mercancía, el seguimiento a las condiciones de vida de los habitantes y la exigencia, al igual que otros derechos humanos, del cumplimiento del derecho humano al agua.
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